Vascones

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Son tantos los estudios publicados sobre el origen y la historia del primitivo pueblo vascón que es imposible en estas pocas líneas tener en cuenta todas las consideraciones que se han hecho al respecto para adaptarlas a nuestro comentario, máxime cuando no siempre la guía principal de algunos de esos estudios ha sido el aspecto científico.

Los vascones fueron un pueblo que en la antigüedad habitaron lo que hoy es la actual Navarraparte de la provincia de Zaragoza, y zonas del sur de Álava y del norte de Burgos. Pero estas fronteras no fueron inamovibles y además de su primitiva ubicación fue teniendo más o menos extensión dependiendo de los avances y retrocesos de sus luchas territoriales, con clara influencia en zonas de La Rioja, País Vasco y norte de Burgos. En este modesto trabajo vamos a contemplar la imagen del individuo vascón que vemos en las monedas acuñadas durante el período comprendido, aproximadamente, entre los siglos II a.C. y I d.C. 

bustos de las monedas ibéricas del norte
Retratos Vascones. Las fotografías utilizadas provienen de nuestra Subasta 44 - Eques Collection, que se celebrará el próximo 5 de noviembre a las 17:00 horas (CET), que cuenta con más de 300 piezas ibéricas y está centrada, sobre todo, en las cecas Vasconas

 

El aspecto que nos confieren los retratos que aparecen en las monedas objeto de estudio es el de gente rudade barba poblada, nariz prominente y abundante cabellera de singular peinado, todos estos son rasgos comunes a los pueblos representados en buena parte de las monedas hispanas de la época, pero cuando la pieza es vascona tienen un perfil especial que les es característico.

Reversos de las monedas ibéricas del norte
Reversos Vascones. Las fotografías utilizadas provienen de nuestra Subasta 44 - Eques Collection, que se celebrará el próximo 5 de noviembre a las 17:00 horas (CET), que cuenta con más de 300 piezas ibéricas y está centrada, sobre todo, en las cecas Vasconas.

 

En los reversos de los ases de estas cecas vasconas, siempre nos encontramos con un jinete armado, pueden llevar espada, ¿hoz de guerra?, lanza, hacha “bipenne”, venablo o en una rara moneda de la ceca de Ontikes una “triqueta” de incierto significado. ¿Portador de muerte a sus enemigos?

De alguna manera, cuando tienes en la mano un ejemplar de los vascones y estás familiarizado con este tipo de piezas no te hace falta darle la vuelta, ya sabes que pertenece a esa tribu.

Hay algunos factores que debemos tener en cuenta a la hora de hacer este tipo de comentarios, uno de ellos es que quien no esté familiarizado con estas acuñaciones tendrá dificultades para entender lo que intento transmitir, pues pensará ¿Cómo que viéndole el anverso a la moneda puedo saber estoy ante una pieza vascona? Pero estoy seguro que mucha gente me estará entendiendo perfectamente. 

Hago una serie de apreciaciones que pueden contribuir a valorar mejor la sensación que puede producir tener una pieza de estas cecas vasconas en la mano.

Leandro Villaronga en su “Corpus Nummum Hispaniae Ante Augusti Aetatem” contempla las siguientes cecas hispánicas como pertenecientes a las tribus vasconas:

Barskunes – Baskunes. Probablemente sea la misma ceca.

Arsaos. No se conoce su ubicación.

Arsakos. No se conoce su ubicación.

Bentian. No se conoce su ubicación.

Kaiskata. Cascante, cerca de Tudela.

Kueliokos. No se conoce su ubicación.

Olkairun. La primera referencia que tenemos de ella, data de 1.965 publicada por Aldecoa en Numisma 73. No se conoce su ubicación.

Ontikes.

Unanbaate. No se conoce su ubicación.

Tirsos. ¿Oteiza de la Solana? (Según los estudios de Doña Alicia Arévalo)

Turiasu. La actual Tarazona (Zaragoza).

Me permito incluir unas cecas que en algún momento pudieron estar en el área de influencia vascona por unas u otras consideraciones que no entraremos en ellas y que darían pie para un extenso y complicado trabajo que no es nuestra intención.

Kalakorikos

Uarakos. ¿Varea? (La Rioja)

Iaka. Jaca. (Huesca)

Sekia. Ejea de los Caballeros. (Zaragoza)

Graccurris. Es la ciudad romana más antigua fundada en España por Tiberio Sempronio Graco en el 179 a C. cerca de Calagurris. Es la actual Alfaro (La Rioja). Acuñó moneda en época de Tiberio.

En estas cecas se aprecia ese perfil vascón. A esta relación podríamos añadir:

Ercavica y Alaun como refleja Ptolomeo según la relación que incluimos a continuación, pero estimo que el tipo celtibérico es mucho más patente que el vascón.

Referencia de Ptolomeo de una serie de ciudades vasconas: Oiasso, Eturissa, Pompaelo, Bituris, Andelos, Nemeturissa, Curnonium, Iacca, Gracurris, Calagurris, Cascantum, Ercavica, Tarraga, Muscaria, Sekia y Allauona.

Eques Collection. Lote 6018. Arsaos. Denario. 120-80 a.C. Zona de Navarra. (Abh-139). (Acip-1663). Anv.: Cabeza masculina barbada a derecha, delante delfín, detrás arado. Rev.: Jinete con dardo a derecha, debajo ARSAOS. Ag. 3,84 g. Peinado de dos niveles con una espiral de rizos entre ellos. Rara. MBC+. Precio de Salida: 220€ – Estimado: 350€

Como podemos apreciar Iaca y Sekia, de las que apreciamos rasgos vascones en sus acuñaciones, están en nuestra lista de cuatro cecas de influencia vascona, lo que es un interesante punto de apoyo de nuestra tesis. Suponemos que Iacca es nuestra Iaca, la actual Jaca en Huesca, aunque no es seguro.

No puede significar esta similitud estilística una prueba de identidad étnica ni cosa parecida, pero resulta innegable que existe un estilo vascón en las acuñaciones de estas ciudades o de estos pueblos a los que representan estas cecas y que no es un estilo bárbaro como observamos en las acuñaciones de Teitiakos o de arte degenerado y bárbaro también, como sería el de algunas acuñaciones de Titiakos, sino que contienen unos parámetros con una clara personalidad definida que ha perdurado hasta nuestros días a través de las monedas.

Es muy probable que estas cecas compartieran algún tipo de artistas ambulantes que supieran fabricar los cuños y que pudieron haber trabajado al dictado de quien les encargarse el diseño o tal vez una escuela que protagonizara ese estilo para dar un aire fiero a sus piezas y que atemorizara a los enemigos de quien le encargase el trabajo estableciendo la función parlante que en aquella época cumplía la moneda.

Respecto del idioma, debemos decir que es el mismo en todas estas cecas y no sólo en ellas sino en la casi totalidad de las diferentes tribus que poblaban la península. De esta época debemos excluir, desde un punto de vista numismático, el grupo de la zona latina del sur que básicamente utiliza caracteres latinos, aquellas cecas que presentan caracteres epigráficos fenicios y libio-fenicios y desde luego los de escritura sud-lusitana. Anteriormente conocemos acuñaciones con leyendas griegas como el caso de Rosas, pero no tuvo emisiones en el período que estamos contemplando. Hay una rara emisión en la Edetania que llamamos de Neptuno – Victoria, de caracteres helenizantes y otras con caracteres ibéricos del sur que comprende las cecas de Ikalkusken, Kelin y Urkesken (Norte) y Kastilo, Obulco, Abra, Iltiraka, Ilturir e Iliturgi (Sur).

Esto me hace pensar, que la teoría del vasco-iberismo que ya apuntaba Estrabón cuando en el siglo I afirmaba que: “aquitanos (en este grupo están los vascos) e iberos eran muy parecidos y hablaban lo mismo” es una teoría sólida, aunque con un origen filogenético difícil de demostrar.

 Decir que el vasco deriva del íbero o lo contrario posiblemente sea un tema eterno de apasionante discusión en el que debemos confiar que la arqueología aporte nuevos materiales de investigación que resuelvan nuestras dudas.

Otro aspecto que debemos destacar en el vasco es que probablemente fue un magnífico guerrero que tuvo la visión de dejar aparcado su orgullo y aceptar un plan más pragmático que el de otras tribus heroicas que a lo largo y ancho de la península dieron muestras de un inusitado valor y fiereza pero que nada pudo contra la maquinaria política y militar de los romanos que colonizaron la península. Los vascos fueron colaboradores de los romanos en campañas militares y fueron uno de los pueblos que antes se colonizaron e introdujeron el latín en su lenguaje cotidiano sin dejar por ello de hablar su lengua. Las disputas que mantenían con algunos de sus vecinos como los várdulos, caristios y autrigones las resolvieron poniéndose del lado romano contra estas tribus, también vasconas o que según recogen diferentes investigadores hablaban el vascuence.

Poco a poco la tribu de los vascones se fue imponiendo en su área y expandiéndose por los terrenos colindantes. Podemos decir que supieron adaptarse mejor que otros pueblos a la dominación romana.

La formidable barrera de los Pirineos separó Aquitania del resto de las tribus vasconas. En esta parte de Francia se hablaba un idioma muy parecido al del otro lado del gran sistema montañoso. Hoy en día el euskera es uno de los idiomas oficiales de España. En Francia no tiene reconocido un status oficial. 

Este artículo "Vascones" redactado por Don José Antonio Herrero está inspirado en la Colección Eques, una interesante selección de más de 300 piezas de Hispania Antigua, que se centra, sobre todo, en las cecas vasconas, y dónde el coleccionista podrá encontrar piezas de extrema rareza, como los ases de OLKAIRUN, TIRSOS o UNANBAATE, entre otras.

 

Lo que está claro es que hay muchas incógnitas que despejar en estas cuestiones y algunas es posible que no lo hagan nunca por perderse en la noche de los tiempos. Un vasco del siglo I a.C. podía coger su caballo e ir a visitar a su novia que era de Arsaos, visitar a sus tíos de Unanbaate y pasar unos días con los amigos en Olkairun. Hoy nadie podría hacerlo porque sencillamente no sabemos donde se encuentran estos primitivos pueblos que en su día acuñaron las bellas monedas que han llegado hasta nuestros días.

 Lo que sí podemos hacer es tener unas piezas que un día se hicieron en estas desaparecidas localidades y cuyo nombre aún conservan en su primitivo idioma. Podemos preguntarles: ¿En qué lugar está el pueblo donde os acuñaron? Quizá a ustedes se lo digan, yo no he tenido éxito.

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