La fauna y la flora en la moneda ibérica Vol. I

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Allá por el año 1979, Antonio Mª de Guadán publicó en Cuadernos de Numismática, un trabajo en el que nos ilustraba sobre las armas en la moneda ibérica.

Emulando al gran coleccionista e investigador opinamos que la flora y la fauna, presentes en nuestra antigua numismática, merecen también una breve descripción por nuestra parte, que nos recuerde su presencia en ella.

Ni mucho menos pretendemos en este artículo llegar al rigor científico con el que el ilustre maestro nos obsequiaba a través de sus publicaciones pues nuestro cometido es intentar ser ameno e instructivo y no otra cosa.

Lo primero que haremos es dejar claro qué entendemos, en este trabajo, por moneda ibérica: Consideramos que lo es la acuñada en nuestra península y en el sudeste francés hasta la llegada de las invasoras tribus germánicas que terminaron con la autoridad romana que desde Augusto se había instalado en ella definitivamente. Añadimos el espacio insular de Ebusus, puesto que en esta isla hubo una importante producción monetaria.

Lo bueno que tiene una península, para fijar un territorio, es que el límite natural del mar no tiene connotaciones de índole político a la hora de definir una frontera. En nuestro caso, la barrera pirenaica hace el resto, sin olvidarnos de la zona narbonense tan orgullosa de sus reminiscencias
ibéricas.

Hemos dividido el presente trabajo en dos partes claramente diferenciadas (que publicaremos a lo largo de tres artículos), pues una tiene que ver con la fauna en todos sus aspectos y la otra con la flora. Respecto a la primera hemos hecho una división poco rigurosa, pues no es el fin del trabajo liarnos con los a veces complicados, aunque necesarios, nombres científicos, donde algunos elementos como el Centauro serían de difícil ubicación.

Son cinco los grupos en que hemos dividido a los diferentes “animalitos” que ocupan nuestro trabajo, huyendo de divisiones engorrosas.

Un lobo es un cánido, un león es un felino y un caballo es un équido, pero los tres son terrestres y con esa denominación seguro que todos nos entendemos.

A quien no esté familiarizado con la numismática ibérica le puede sorprender la cantidad de representaciones relacionadas con la fauna que en ella se ven plasmadas. Esta es nuestra división:

1- ANIMALES TERRESTRES
2- ANIMALES MARINOS
3- AVES
4- INSECTOS
5- SERES MITOLÓGICOS

ANIMALES TERRESTRES

Buey

Normalmente se le ve representado arando, uncido junto a otro bajo un yugo, y conducido por un agricultor. Un ejemplo lo tenemos en el reverso de un as de Kelse (Colonia Lepida) C-18.

Otra representación de este animal es una cabeza de frente, viene representado en las fraccionarias anteriores a las dracmas. C-41.

Es de suponer que ustedes se hagan la misma pregunta que nosotros: ¿Cómo sabemos si una cabeza astada, de frente corresponde a un buey, a un toro o a una vaca? No duden en informarnos si tienen respuesta a eso.

Toro

As Kelse Tauler&Fau lote 2056
Kelse. As. Tauler&Fau. Subasta 69, Lote 2056.

Su nombre científico es Bos Primigenius Taurus. Como verán es más sencillo acudir a las denominaciones de andar por casa aún a riesgo de cometer alguna incorrección.

Este bóvido es junto con el delfín y el caballo es el animal más representado en las amonedaciones ibéricas. Es un símbolo de fuerza y protección. Lo podemos contemplar en diferentes posturas:

Parado: en un as de Turiaso. ACIP-3.290. También es el motivo del reverso del raro semis acuñado en Ebusus en los años de Claudio I.

Embistiendo: en un semis de Untikesken. C-6.

Saltando: en un as de Kelse (Colonia Lepida) C-23.

Arrodillado: como en Orippo, ACIP- 2.456 y 2.457.

Tumbado: como en un as de Ipora. C-1.

Mitrado: como en ases de Caesaraugusta: ACIP- 3058/3066.

Hay una bonita representación en un as atribuido a Kastilo, que hace referencia al rapto de Europa en el que la joven va agarrada a uno de los cuernos del toro.

No recuerdo manifestación alguna de un astado con buenas ubres que sería la representación más idónea de una vaca.

Curiosamente para paliar esta discriminación, a las monedas de las diferentes cecas que llevan un toro o un buey en el reverso, en el argot numismático se las conoce como “vacas”.

Carnero

El macho de la oveja está presente en las primeras monedas conocidas que podrían haber sido acuñadas en la península ibérica en el siglo V a.C. En ellas está representada la cabeza del animal. C-1 y 2. También en C-7 en el siglo IV a.C. en el apartado de las fraccionarias anteriores a las dracmas.

Cordero

De cuerpo entero hay una acuñación que corresponde a dos piezas diferentes de semis de Kelse (Colonia Lepida). C-25 y 26.

Cabra

Este animal tan característico de nuestra fauna está representado en monedas fraccionarias anteriores a las dracmas en el siglo IV a.C. Probablemente fueron acuñadas en Cataluña en el área de influencia emporitana. En C-8,42,43 y 44 encontramos unos bonitos ejemplares. Particularmente opino que es muy bello el reverso de Vill-2/312.

Caballo

En este noble bruto tenemos al más representativo de los elementos de nuestra fauna numismática. No sólo por la variedad de cecas en las que está representado sino por los símbolos que acompañan
a quienes los conducen.

Probablemente la función parlante de la moneda pretendía indicar al resto de tribus que quienes acuñaban esas monedas tenían guerreros bien armados y caballos para hacer frente a sus enemigos cuando se les representa con lanza, falcata, escudo, etc. Otras veces llevan una palma, que puede significar jinetes o ejército victorioso, o un trofeo.

Casi siempre, los ases que llevan en su reverso un jinete sobre caballo, tienen en los semis un caballo suelto con brida al aire.

Los podemos ver adoptando diferentes posturas:

Caballo parado: como en el bellísimo tres sículos de Cartagonova de particular estilo púnico. C-16.

Caballo saltando: sículo de Cartagonova. C-27.

Caballo con jinete: me gusta el de Bilbilis de la época de Augusto, esta pieza sirvió de modelo e inspiración para las piezas de 10 céntimos de aluminio acuñadas desde 1.940 hasta 1.953. Debajo del jinete aparecía la palabra ESPAÑA. ACIP- 3.014.

Caballo galopando: el as de Kelse: C-8 podía ser una buena representación de este tipo.

Caballo pastando: Lo podemos observar en algunos trientes de Kese, como en C-25. Hay una curiosa representación de este tipo, en C-13, donde se puede apreciar una mata bajo la cabeza del caballo.

Caballo piafando: es característico de la ceca de Kese y aparece en varios semises como en C-44. Otros opinan que puede estar representando un caballo al paso.

Cabeza de caballo: lo podemos ver representado en una hemidracma de Arse: C-5 o en un cuadrante de Obulco: C-70.

Formando parte de una cuadriga: lo vemos en un bonito áureo de Colonia Patricia a nombre de Augusto. La cuadriga va conducida por un águila. ACIP- 4332. 

Formando parte de una biga: aparece en una dracma de imitación de las emporitanas. ACIP: 268 y 269.

Unidos por la espalda: esta curiosa representación la encontramos en un tartemorion de Sikara en su reverso. ACIP- 284.

Dos caballos: a veces aparece un jinete que lleva a su lado un segundo caballo. La ceca que más veces contempla este tipo es la de Ikalkusken. También lo encontramos en dos quinarios, uno de Turiasu: C-18. Y otro de Kese: C- 20. También en el denario de esta ceca: C-17/19.

Cerdo/Jabalí

cuadrante kastilo-castulo Tauler&Fau lote 2103
Kastilo-Castulo. Cuadrante. Tauler&Fau. Subasta 40, Lote 2103.

Realmente las representaciones de este animal lo son en su versión salvaje: el jabalí. En Celtitan, Halos y Ostur: ACIP-2.427,2.428 y 2.429 lo encontramos ocupando el reverso de estas monedas como figura principal, en Lascuta ACIP-943 aparece junto a una serpiente. En Eustibaikula o en Arketurki detrás de la cabeza masculina del as: ACIP-1.307 y C-1. En Vill (2) aparece una cabeza de jabalí. Pág. 160, Nº 18.

¿Antílope?

En unos cuadrantes de Nabrisa: ACIP- 2636/2638 así lo consideran a este animal que en el Corpus lo denominan “animal cornúpeta”. El estilo del grabador no es como para poder afirmar nada al
respecto.

Lobo

Está considerado uno de los animales sagrados de la cultura ibérica. Está presente en un buen número de cecas, al parecer es una de las pocas palabras que sabemos en ibero: “ILTIR” que significaría lobo, de ahí el nombre de Iltirta, la actual Lérida, que querría decir algo así como lugar o sitio de lobos.

Lobo en actitud defensiva: lo vemos en un as de Iltirta. C-41.

Lobo al paso: también en un as de Iltirta, C-38. A diferencia del anterior no tiene el rabo entre las piernas. Recordamos aquí que una de las grandes piezas de la numismática ibérica, la hemidracma de KESESALIR lleva en su reverso un lobo de larga lengua, similar al del óbolo de KESEKU, otra pieza de gran rareza.

Cabeza de lobo: en el semis de Iltirta C-42.

Lobo con lobezno: En el semis de Ilteraka, C-2, vemos a un lobo tras una palmera llevando algo en su boca. Unos autores opinan que se trata de un animalito cazado por él (¿conejo?). Otros opinan que transporta a uno de sus lobeznos, nos quedamos con esta opinión que nos parece más bucólica. Debemos tener en cuenta que los lobeznos durante el primer mes son ciegos y sordos, siendo normal el cambio de lobera por parte de sus progenitores, por lo que el traslado se hace llevándolos entre sus fauces.

Loba capitolina: en un semis de Itálica la encontramos amamantando a Rómulo y a Remo. ACIP- 3.330.

León

cuadrante untikesken Tauler&Fau lote 2064
Untikesken. Cuadrante. Tauler&Fau. Subasta 69, Lote 2064.

La verdad es que no creo que en aquellos años hubiera manadas de leones poblando los bosques ibéricos, pero la fiereza de estos animales era bien conocida por nuestros ancestros y debía tener un significado especial de fuerza y fortaleza, está presente en muchas cecas y en diferentes valores. Unas veces puede ser un león y en otros tratarse de una leona, prestándose algunas veces a confusión el sexo del animal representado.

En un cuadrante de Untikesken, ACIP- 1.005, tenemos un león de hermosa melena, evidentemente la misma le delata como a un macho arrogante, lo mismo nos pasa en otras dos monedas de esta ceca, ACIP-1.016 y 1.018.

León con cabeza vuelta: nos encontramos un bonito ejemplar en VILL-2 (139) en una pieza de plata emporitana siglo IV/V a.C.

León saltando: aparece en Beterra, C-1.

León erguido: fantástico ejemplar en el que el rey de la selva es la figura central del reverso en un semis de Sekobirikes: C-3.

Leona: es la denominación que reciben los animales que van detrás de las cabezas del anverso en algunas monedas de Sekaisa. ACIP-1.528 Y 1536. También lo vemos delante como en un as de la misma ceca: ACIP-1522.

Se ha relacionado al león con una diosa ibérica de los bosques similar a la consideración recibida por Artemisa, diosa de la caza y de los animales salvajes.

Elefante

shekel cartagonova Tauler&Fau lote 59
Catagonova. 1 1/2 Shekel. Tauler&Fau. Subasta 50, Lote 59.

Tampoco el elefante es un animal endémico de nuestra península, pero es evidente que la continuada presencia de los ejércitos cartagineses hizo que supiéramos de la fuerza y la capacidad de estos animales para sembrar el caos y el desconcierto entre las tropas a las que embestían con sus más de 4.000 kgs. Y sus imponentes defensas.

Como parece lógico, en nuestra numismática, los ejemplos más bellos de este paquidermo los tenemos en sendas piezas de Cartagonova; en una pieza de tres sículos: ACIP- 552; y en otra de dos sículos: ACIP- 553. En esta última el elefante lleva un guía que lo conduce (cornaca).

También está representado el elefante en un as de Sacili: ACIP-956 y en otro de Usekerte, este a imitación del que vemos reflejado en el denario de Julio César: Sby-49. En esta interesante pieza bilingüe podemos apreciar el carácter africano del paquidermo, algo mayor que su homónimo hindú. Además, le vemos pisoteando a una serpiente, en clara alusión a lo que les podía esperar a los enemigos que pretendieran hacer frente al victorioso César. Recordemos como curiosidad que la palabra “caesar” en púnico significa elefante, nombre que adoptó el padre de Julio cuando, según recoge la tradición, dio muerte a uno de estos animales.

Usekerte es la única representación celtíbera de este animal pues las demás son de la órbita fenicio-cartaginesa.

Lascuta es otra ceca que lleva un elefante en su reverso.

En unos áureos acuñados en Colonia Patricia lo vemos conformando una biga de elefantes conducida por el propio Augusto. ACIP: 4345/4348.

Oso

Al pensar en este magnífico animal, parece que lo podríamos ver representado en alguna ceca del norte de la península en alguna ceca pirenaica o tal vez vascona. Pero no es así. Tenemos que asomarnos a la actual Osuna en Sevilla, la primitiva Ursone.

Puede estar representado de pie, ACIP- 2328, o sentado, ACIP- 2330.

Es la única ceca ibérica en la que nuestro rey del bosque está representado.

Serpiente

En Lascuta y en Usekerte hemos visto dos piezas en las que aparece el citado ofidio. En Cartagonova: ACIP-2.525, nos encontramos una serpiente terrestre parcialmente enroscada.

Este reptil aparece abundantemente en las acuñaciones ibicencas, pues el dios fenicio Bes es portador del mismo apareciendo en buena parte de las amonedaciones de la isla. Habitualmente la lleva en su mano izquierda.

Perro

A pesar de ser el mejor amigo del hombre no está muy presente en nuestras cecas, aparece en Kese: C-46. Es posible que en la ceca de Abariltur, algunos de los animales representados sean perros, como el sextante de C-2 o el semis de C-1.

Lagartija

No es un animal que pueda presumir de una representación muy garbosa, pues lo encontramos en Kese: C- 37 y 38 en el pico de un gallo, suponemos que para servir de aperitivo al rey del corral.

semis arekoratas Tauler&Fau lote 45
Arekoratas. Semis. Tauler&Fay. Subasta 50, Lote 45.

No tendría nada de particular que en algún momento pudiera aparecer alguna moneda que llevara alguno de estos animales a los que hemos echado de menos: Conejo, Burro, Rata, Liebre, Gato, Gallo, por citar solo a algunos que tan presentes estaban en la vida cotidiana de nuestros pueblos. Siempre será bien recibida cualquier aportación que alguien quiera añadir a este trabajo, puesto que alguna cosa se nos puede haber pasado por alto.

ANIMALES MARINOS

Atún

hemidracma gades Tauler&Fau lote 40
Gades. Hemidracma. Tauler&Fau. Subasta 70, Lote 40.

Junto con el delfín, son los dos animales marinos más representados en nuestra numismática, incluso llegan a aparecer juntos como en el caso de Abdera: C- 13/17 o Sexi: C-15.

El atún creo que se representa en la numismática más bien como símbolo de fuente de riqueza de los pueblos que se dedicaban a su captura. Son varias las cecas en las que le vemos representado: Aipora C-1, Sexi C-1, Osonuba: C-1, etc.

Las representaciones ictícolas son fieles testigos de la importancia con la que los pueblos emisores nos querían mostrar el valor de los recursos propios como es el caso de Gadir, Sexi, Osonuba, etc. Llama la atención la representación de un atún en un semis de una ciudad como Sisapo, la actual Almadén, tan apartada de zonas pesqueras (C-1A). Esto nos hace pensar que esta rara pieza podría ser atribuible a una ciudad costera. Hay que tener en cuenta que lleva una S del valor semis en su reverso; de ser una acuñación coetánea de Sisapo, el peso de la pieza se correspondería más bien con un cuadrante.

Delfín

as ketovión Tauler&Fau lote 54
Ketovión. As. Tauler&Fau. Subasta 60, Lote 54.

Las gentes del mar los consideraban como un presagio de buena suerte. A veces acompañaban a las embarcaciones pesqueras. Según la Mitología griega, los delfines fueron transformados en estos cetáceos por el dios Dionisio como venganza ante su secuestro para ser vendido como esclavo. Poesidón mandó como emisario a un delfín para que convenciera a la bella Anfitrite que se casara con él. Por eso en la representación de este dios a veces se le ve acompañado por ellos.

Este símbolo aparece con mucha frecuencia en nuestra numismática, creo que, junto con el caballo, es el animal más representado. En las cecas del norte de la península aparecen rodeando a una cabeza masculina o femenina, puede llevar desde uno hasta cuatro delfines.

As Segia: C- 4 (uno), Lutiakos: C-2 (dos), Orosi: C-2 (tres).

Tomando más protagonismo, aparece en las cecas del sur como en Olontigi: C-13, Gadir: C-42.

Otras veces aparece conducido por un amorcillo como en el caso del cuadrante de Saiti: C-10; y de un semis de Ipses: C-1.

También puede estar representado atravesado por un tridente como en Gadir: C-53.

En “rueda”, los tenemos en Emporion: C-39 o en Ilturo: C-2.

Hipocampo

Conocido también como caballito de mar, este simpático animalito no tiene nada que ver con aquellos seres mitológicos que tiraban del carro de Neptuno; caballo en su parte delantera y cuerpo de pez en las traseras, aunque es posible que esta fuera la idea de su representación en nuestras monedas. Lo tenemos formando parte del doble sículo de la proa en ACIP-542; en Beuibum: 986 y 987; o en un cuadrante de Kese: C-36.

En Neronken: C-7, tenemos un raro semis con hipocampo alado, única representación de este tipo.

Sábalo

Este pez sube por los ríos en verano para desovar, lo hace en grandes cantidades, por lo que parece razonable que nuestros antepasados los pescaran en las desembocaduras de los ríos, sobre todo
los situados más al sur, pues es una especie que se adapta mejor a climas cálidos y templados. También recibe el nombre de tarpón. A veces puede confundirse su representación con la del atún.

Lo encontramos presente en Mirtiles C-1-4, o en Ilse y en Ilipense en diversos ejemplares.

Cangrejo

Lo tenemos presente en un óbolo anterior a las dracmas: ACIP-94, aunque más bien nos recuerda un suculento centollo.

Serpiente marina

La encontramos en un hemióbolo del tipo de divisores inciertos, aunque al parecer tiene la leyenda Kuekiar y podría tratarse de una acuñación de esta posible ceca. C-12, pág. 78. Tampoco sería descabellado pensar en un hipocampo no muy bien diseñado.

Gamba

En este apartado creo que debemos incluir a todos los productos del mar que se parecen a este crustáceo como la quisquilla, el langostino o el camarón. Lo vemos en una dracma de Emporion: C-75.

Medusa

Nos referimos al animal marino, no al ser mitológico. Lo apreciamos en una dracma ibérica como símbolo delante del Pegaso. No tiene leyenda visible. C- 89A.

Pulpo

Este popular y exquisito octópodo lo podemos apreciar como símbolo en: Vill. (7). Pág. 118, Nº 64 y 65.

Venera

cuadrante gili Tauler&Fau lote 52
Gili. Cuadrante. Tauler&Fau. Subasta 20, Lote 52.

En primer lugar, intentaremos arrojar algo de luz sobre estos términos que se usan a veces con cierta confusión, no nos extrañe después de analizarlo. Muchas veces decimos de manera indistinta los siguientes vocablos: Vieira, venera, pecten, pechina o concha para definir lo que envuelve a eso que nos comemos y que está tan rico.

En primer lugar, el “bicho” es la vieira; la venera es la concha de la vieira.

Pechina es lo mismo que vieira y viene del latín pecten. Aquí nos encontramos con los nombres científicos tan necesarios y que en esta ocasión nos van a diferenciar dos especies: Pectén maximus, cuyo hábitat es el Atlántico; y Pectén Jacobaeus, que vive en el Mediterráneo. Son muy similares, llegando a cruzarse ambas especies.

Para terminar, pechina es la concha de un molusco. Este término se usa más en las zonas costeras y el término concha más en el interior. Por lo que podemos decir que cuando hablamos de vieira, concha, pechina, pectén o venera, me temo que todos queremos decir lo mismo, y es que tenemos un
lenguaje tan rico…

La venera forma parte de varias cecas, siempre en piezas de tipo divisor. La ceca de Arse se lleva la palma en lo que a su presencia se refiere por la tipología tan amplia que presenta, pero la tenemos presente en otras cecas como Kili: C-2, Lakine: C-3 y 4 o en Saiti: C-6.

Calamar

Este apetitoso cefalópodo lo encontramos debajo del Pegaso en una dracma emporitana: C-80.

Cangrejo ermitaño

Lo encontramos en una dracma emporitana, probablemente era utilizado como cebo por parte de los pescadores para la pesca con caña. ACIP-229.

Pescador

semis carteia Tauler&fau lote 2199
Carteia. Semis. Tauler&Fau. Subasta 24, Lote 2199.

En un semis de Carteia encontramos un pescador que acaba de sacar un pez todavía en el anzuelo pendiente del sedal. C-53. Supongo que es imposible determinar el tipo de pez, así que dejamos a la
imaginación del lector que ponga el que más le guste.

CONTINUARÁ…

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